miércoles, 17 de febrero de 2016

'El renacido': Lenta supervivencia, venganza predecible

Leonardo DiCaprio saborea la gloria que tanto anhela. Y lo hace con un tipo de cine, el de aventuras, prácticamente inhóspito en su dilatada carrera. Pero eso sí, sufre lo indecible por sobrevivir y cobrarse una venganza algo previsible. Quizá esas muecas de dolor, esa exagerada gesticulación acompañada de pronunciados silencios eran lo que necesitaba este actor que, de largo, ha hecho papeles mejores que el que brinda en El renacido, de Alejandro González Iñarritu (Birdman, Babel) -argumento calcado a El hombre de una tierra salvaje, 1971)


La película del cineasta mexicano narra la historia de Hugh Glass -Leonardo DiCaprio-, que participa junto a su hijo mestizo Hawk en una expedición de recolecta pieles hasta que una emboscada de una tribu india provoca el desastre en las filas de estos tramperos. Para más inri y tras la huida, Glass es atacado por un gigantesco grizzly que lo deja al borde de la muerte. Una muerte que uno de sus compañeros exploradores, John Fitzgerald -Tom Hardy- va a cobrarse pro ciertas rencillas personales.

Leonardo DiCaprio es el explorado Hugh Class, que pasa las de Caín en 'El renacido'.

Solo y desamparado, Glass tiene como única arma su espíritu de supervivencia y el ansia de venganza por la traición de Fitzgerald. Ese ánimo de venganza es el motor que le mantiene vivo en un ambiente hostil, donde debe hacer frente a indios y las inclemencias del tiempo. Todo por hacer justicia a su memoria y evitar que la traición quede impune.

Entre la aventura y la épica se mueve el trabajo del tándem Iñarritu-DiCaprio. Un camino, eso sí, lento y predecible. La historia -basada en hechos reales- no ofrece nada nuevo en una época donde tramperos e indios luchaban por un trozo de terreno. Robert Redford, en Las aventuras de Jeremiah Johnson, ya vivió en sus carnes esta lucha. Pero en la cinta de Alejandro González Iñarritu hay menos trama y menos alma que en la obra de Sidney Pollack.

Tom Hardy recibe instrucciones del director mexicano Alejandro González Iñarritu.

Quizá sea la excesiva gesticulación de los personajes, convertidos en alimañas y casi desterrados de cualquier tipo de humanidad, lo que hace que no enganche. Eso y los infinitos planos en los que se recrea el director mexicano, consiguiendo una especie de documental de excesiva duración, contribuyen a que la historia avance terriblemente despacio.

Cierto que en esta temporada, Tom Hardy ya vivía algo similar en Mad Max: Fury Road. Incluso su personaje de Fitzgerald tiene más frases que el héroe postapocalíptico, pero en aquella ocasión no necesitaba hablar para captar la atención. En cambio Leonardo DiCaprio, acostumbrado a largos soliloquios, aquí se mueve entre la introspección y el silencio constante, apenas con diálogos que no aportan nada. Premia su trabajo corporal frente al lingüístico, algo criticable cuando el director está más empeñado en encandilarnos con imágenes que con argumento.

El enfrentamiento entre los indios y los tramperos son los momentos de más acción de 'El renacido'.

Porque El renacido es como esos regalos de Navidad con un envoltorio bonito, colorido e incluso deslumbrante, pero cuyo contenido nos desilusiona cuando empezamos a desenvolver. Ante nuestros ojos y sin papel, el producto deja un regusto amargo y obliga aponer una cara de agradecimiento. Y es que la cinta de Iñarritu te deja embobado con semejante paisaje. Una colección de fotografías por segundo que dejan la boca abierta en más de una ocasión -Emmanuel Lubezki, ganador del Oscar por Birdman y Gravity, tiene la 'culpa' de esta belleza-. Sin embargo la trama que esconden esas imágenes es vacua.

Impecable el trabajo de Emmanuel Lubezki al frente de la fotografía.

Los segundos de metraje van pasando después de un principio, eso sí, emocionante, con una emboscada emocionante y brutal, a la que se suma la pelea de DiCaprio con el gigantesco oso -esto y la fotografía salvan la película-. Pero hasta ahí llega el entretenimiento de El renacido. A partir de entonces la pantalla se llena de imágenes de ensueños, un frío gélido paralizador y reflexiones que navegan entre la realidad y la ficción, con curaciones milagrosas, y apariciones fantasmales que chirrían pasado el tiempo.

Las prisas por reconocer a un actor como Leonardo DiCaprio provocan el reconocimiento exacerbado por un trabajo que ni de largo llega a las mejores producciones de uno de los mejores intérpretes de su generación. Hollywood funciona así. Qué se le va hacer.


Ficha Técnica


Título original: The Revenant

Año: 2015

Duración: 156 min.

Género: Aventuras / Drama / Hechos Reales

País: Estados Unidos 

Director: Alejandro González Iñárritu

Guión: Mark L. Smith, Alejandro González Iñárritu (Novela: Michael Punke)

Música: Carsten Nicolai, Ryûichi Sakamoto

Fotografía: Emmanuel Lubezki

Reparto: Leonardo DiCaprio, Tom Hardy, Domhnall Gleeson, Will Poulter, Forrest Goodluck, Paul Anderson, Kristoffer Joner, Joshua Burge, Duane Howard, Melaw Nakehk'o, Fabrice Adde, Arthur RedCloud, Christopher Rosamond, Robert Moloney, Lukas Haas, Brendan Fletcher, Tyson Wood, McCaleb Burnett

Premios: 2015: 3 Premios Oscar: mejor director, actor (DiCaprio) y fotografía. 12 nominaciones
               2015: 3 Globos de Oro: Mejor película drama, director y actor (Leonardo DiCaprio)
               2015: 5 Premios BAFTA: Mejor película, director, actor (DiCaprio), fotografía y sonido
               2015: Critics Choice Awards: Mejor actor (Leonardo DiCaprio) y fotografía
               2015: Directors Guild of America (DGA): Mejor director/película
               2015: Sindicato de Actores (SAG): Mejor actor (Leonardo DiCaprio)
               2015: Satellite Awards: 5 nominaciones incluyendo mejor película y director
               2015: Premios Annie: Mejor animación de personajes en film no animado
               2015: Asociación de Críticos de Chicago: Mejor actor (DiCaprio). 5 nominaciones

Puntuación: 5,5/10

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